Para saber interpretar el mundo, primero hay que aprender a leerlo.
La lectoescritura es un derecho universal y esencial para consolidar el aprendizaje y el desarrollo educativo para el éxito personal.
Con el objetivo de garantizar una educación de calidad, ofrecemos atención y apoyo profesional a la comunidad educativa para promover el aprendizaje de la lectoescritura de aquellos/as niños y niñas de entornos socialmente vulnerables. Consideramos la lectoescritura un motor de cambio para conseguir el éxito educativo y reducir el abandono escolar prematuro.